Hagan lo que hagan, no regresarán al poder los oligarcas: AMLO

Desde el Zócalo, el presidente Andrés Manuel López Obrador envió un mensaje a sus opositores: “Hagan lo que hagan no regresarán al poder los oligarcas. Continuará prevaleciendo en nuestro querido México una auténtica y verdadera democracia”.

“Está garantizada la continuidad con cambio, no hay nada qué temer”, sentenció, al tiempo de enfatizar que cualquiera de los aspirantes que resulte triunfador en la encuesta para elegir candidato de su movimiento “aplicará la misma política en favor del pueblo y en favor de la nación”.

En la conmemoración por el 85 aniversario de la expropiación petrolera, ante 500 mil personas, según el gobierno capitalino, el mandatario afirmó que con el apoyo de los ciudadanos y la conciencia colectiva que hoy tiene el pueblo de México, se podrá contrarrestar la guerra sucia, las campañas de calumnias y los intentos de manipulación de sus opositores.

López Obrador aprovechó la efeméride nacional para también dejar un mensaje a los intentos de una fracción de congresistas estadunidenses del Partido Republicano que han planteado el envío de tropas de su país a territorio mexicano para frenar a las bandas del crimen organizado: “Podrán amenazarnos o cometer cualquier atropello, pero jamás, ¡jamás permitiremos que violen nuestra soberanía y pisoteen la dignidad de nuestra patria!”.

Recordó a “esos políticos hipócritas e irresponsables”, que México es un país independiente y libre, no una colonia ni un protectorado de Washington.

Miles respondieron a la convocatoria hecha por el presidente para acudir a la Plaza de la Constitución y recordar la gesta del ex presidente Lázaro Cárdenas del Río al expropiar la industria petrolera en beneficio de la nación.

Bajo el arropo de un mar de personas, provenientes de todas las entidades del país, López Obrador destacó que la histórica decisión tomada por el general Cárdenas se pudo hacer realidad, entre otras razones, porque contaba con un amplio apoyo y base social, como la que no tuvo en su momento el “apóstol de la democracia”, Francisco I. Madero.

El mandatario resaltó la “conciencia colectiva” de la gente, gracias a la que se podrá contrarrestar todos los ataques, guerra sucia, campañas de calumnias e intentos de manipulación que, se dijo seguro, sus opositores seguirán empleando.

“No les queda de otra a nuestros adversarios y sus medios de información vendidos, alquilados o en manos de los miembros del bloque conservador y corrupto. Pero al mismo tiempo, debemos tener fe en la sabiduría y en la lealtad del pueblo. ¡El pueblo no traiciona!”. Esas palabras causaron el clamor de un Zócalo que lució lleno y desde el que surgieron las consabidas consignas de apoyo a López Obrador y a la cuarta transformación.

“Cooperación, sí; sometimiento, no; intervencionismo, no”, subrayó el mandatario. Y continuó, ya con sus miles de seguidores respondiendo por él:

“Oligarquía”, dijo, a lo que la gente al unísono respondió: “¡No!”. López Obrador entonces siguió: “Corrupción”, y la gente le secundó: “¡No!”. Y vinieron “clasismo y racismo”, a lo que vinieron dos nuevos “¡No!” de todos aquellos que estaban en la plaza pública.

“¡Viva la expropiación petrolera!”, selló López Obrador. El ¡viva” de respuesta fue escandaloso. “¡Vivan los trabajadores y técnicos de antes y de ahora de la industria petrolera nacional!”, una vez más el “viva” ciudadano retumbó en el Zócalo. “¡Viva el general Lázaro Cárdenas del Río!”, un nuevo “¡viva!” secundó al presidente. Y tres “¡Viva México!” dieron por concluido su discurso.

Con información de La Jornada