La solicitud de un derecho bien habido

Por Nelson Vargas

Pese a todas las cosas que han sucedido y se mantienen en torno a la natación mexicana: Las disputas, desacatos y demás controversias con la gente de la Federación Mexicana de Natación, que opera sin importar lo establecido por la Federación Internacional de Natación (FINA), queda claro que los clubes tenemos que seguir en movimiento y debemos realizar las competencias con base en nuestro calendario de eventos.

Por tal motivo, y al ver que todavía se tiene que estar bajo lo que diga esta administración de la FMN, es que hemos decidido solicitar el aval que nos corresponde desde el momento en que la afiliación y situación legal está perfectamente en orden.

Establecido lo anterior, es por eso que en acuática nelsonvargas hemos decidido solicitar ese aval para los torneos que tenemos programados en la temporada 2022- 2023, que arranca -para nosotros- con el Torneo Master Fin de Año, que se llevará a cabo el 11 y 12 de noviembre.

Por tal motivo es que seguiremos en la lucha para agotar todas las instancias y que se nos reconozca como lo que hemos sido durante mucho tiempo, ya que se ha metido una solicitud similar a la Asociación de Natación del Estado de México (ANEM), sin tener respuesta.

Lo que se reclama es tener igual atención a nuestros clubes como se tiene a otros, ya que —insisto— nuestra afiliación y situación legal están en orden. No hay manera de que nos puedan discriminar por las diferencias que hemos expresado y sostenido desde hace tiempo.

Lo más raro es que, durante mucho tiempo, antes del mandato de Kiril Todorov e incluso ya con él al frente de la FMN, sí teníamos ese aval, el cual desapareció, con lo que se violan los derechos adquiridos, ya que estamos al día en nuestras afiliaciones.

En total, para la siguiente temporada, tendremos 11 eventos que deben estar avalados y reconocidos por quienes se dicen al frente de la natación en México, ya que —de no ser así— simple y sencillamente se deberá a rencillas y un abuso de poder de la posición en la que se encuentran.

No existe otro argumento para no dar este aval y, ya que nos obligan a tenerlo, es que lo solicitamos como lo debe y puede hacer cualquier otro afiliado.

No se exige más que el derecho que tenemos, un derecho bien habido.