Avanza Parlamento Abierto sobre iniciativa de Reforma Eléctrica

Este miércoles se llevó a cabo en la Cámara de Diputados el Foro 7: Sistema Eléctrico, Seguridad Energética y Seguridad Nacional, como parte del Parlamento Abierto en torno al análisis de la iniciativa de reforma eléctrica enviada por el titular del Ejecutivo Federal.

En el encuentro, con el tema “El Papel del Estado en la Construcción del Sistema Eléctrico Nacional”, especialistas externaron sus posturas y dieron respuesta a cuestionamientos de las y los diputados de diversos grupos parlamentarios.

El presidente de la Junta de Coordinación Política, diputado Rubén Moreira Valdez (PRI), agradeció a los ponentes su disposición para estar en la Cámara de Diputados y plantear su posición “sobre un tema importante para la nación que es cómo sostener con energía eléctrica al país”, y llevar a cabo un diálogo para aclarar las dudas y ampliar conocimientos. 

Aclaró que estos foros están diseñados para hacer preguntas, escuchar a los ponentes, y consideró que fue una jornada de trabajo muy buena. 

Participantes

Al hablar en contra de la propuesta, Luis Serra Barragán, director ejecutivo de la Iniciativa de Energía del Tecnológico de Monterrey en la Escuela de Gobierno y Transformación Pública, señaló que el Estado tiene como función operar en condiciones de continuidad, seguridad, sustentabilidad y eficiencia dicho sistema. Consideró que un sistema eléctrico moderno es complejo, pero es flexible y eso significa que tienen que adecuarse y hacerse inversiones para el acoplamiento de esas tecnologías a la red eléctrica.  

Estimó que “deberíamos estar mirando hacia un fenómeno que es irreversible: la digitalización de la red eléctrica y la industria 4.0”. Enfatizó que la seguridad energética debe garantizar el acceso a energías limpias y asequibles en un esquema donde los resultados sean trazables, que estén sujetos a evaluaciones independientes y que incluyan a todos los actores de la sociedad.  

A favor de la propuesta, Rosío Vargas Suárez, investigadora del Centro de Investigaciones sobre América del Norte de la UNAM, señaló que “la industria eléctrica es estratégica por su importancia para la economía y la sociedad, no es una actividad más ni un bien comercializable; puede existir con el sector privado, pero corresponde al Estado ser el garante del acceso universal a la electricidad sin restricciones operativas ni de mercado”. 

Resaltó que existen riesgos y amenazas en la industria eléctrica que pueden poner en peligro la seguridad nacional. La magnitud de los actuales y su capacidad y daño físico y económico a la infraestructura y otras actividades de la industria obligarían a otórgales la mayor importancia. Destacó que la planeación es un elemento importante a futuro y “difícilmente yo veo en un actor privado toda esta visión nacional”. 

En contra, Fernando Zendejas Reyes, ex subsecretario de Electricidad de la Secretaría de Energía, señaló que de acuerdo a la ley corresponde exclusivamente a la nación la planeación y control del sector eléctrico, “en ningún lado dice sector privado”. Hoy la Ley de la Industria Eléctrica permite la participación de particulares en la generación y suministro, “lo cual estaría en entredicho y el suministro estaría completamente prohibido de aprobarse esta nociva iniciativa de reforma energética”.     

“La disyuntiva es ¿qué queremos como país? ¿Queremos un sistema eléctrico nacional que permita una participación, como lo dice la Constitución, de los sectores público y privado, con reglas claras, con un Estado rector? ¿o queremos un monopsonio en el que una sola empresa compre, venda y fije tarifas y se condene a tener que hacer todas las inversiones”. Resaltó que “las plantas de generación tienen una vida útil, no son perpetuas y las líneas de transmisión y distribución necesitan ampliarse y modernizarse”.  

Al externar su postura a favor, Guillermo Nevárez Elizondo, director de Distribución de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), afirmó que el sistema eléctrico nacional es uno de los más grandes del mundo, que está interconectado y es robusto. Es un sistema integrado que da servicio a todo el país y alcanza el 99.2 por ciento de cobertura del servicio a toda la República.  

Subrayó que la seguridad energética es muy importante para la autosuficiencia y el abastecimiento continuo a la población, “pero sin trucos ni intereses que engañen en el tema de las tarifas reguladas con el costo marginal, con la tarifa social”.   

Karla Cedano, responsable de Gestión de Tecnología del Instituto de Energías Renovables (IER), al manifestarse en contra dijo que “poner más plantas nucleares sería un grandísimo error siempre”. Consideró que para alcanzar la seguridad energética se requiere la colaboración de todos, gobierno, academia, industria y sociedad; “es responsabilidad del Estado, pero tenemos todos responsabilidad en eso”.  

Estimó que es necesario democratizar la energía, formar más talento en investigación y desarrollo e innovación en México; “tenemos que hacer financiamiento sustentable, no sólo económico. Requerimos de organismos reguladores autónomos e independientes, “no puede ser juez y parte la CFE, necesitamos que haya esa independencia, esa gobernanza sana” y un sistema energético sustentable, seguro y soberano.        

A favor, Carlos Morales Mar, director de Operaciones de la CFE, comentó que hay tres pilares que se buscan con esta reforma eléctrica, que es la garantía del suministro, precios justos y un modelo sostenible. Precisó que de las diferentes tecnologías que existen en la generación actual algunas emiten contaminantes, otras son muy caras, o intermitentes; “entonces, no existe una generación energéticamente ideal, porque para el futuro nosotros debemos estar viendo cuáles son las disponibilidades de los recursos y no depender tanto de lo externo”. 

Señaló que la reforma energética de 2013 es insostenible y desordenada, vulnera al sistema eléctrico nacional, genera alta concentración nodal de centrales eléctricas renovales, saturación regional de líneas de alta tensión, sobreoferta de capacidad por permisos otorgados sin planeación, imposición legal y regulatoria, entre otros. Por eso se requiere la aprobación de la iniciativa presidencial de reforma constitucional en materia eléctrica. 

Participación de diputadas y diputados

El coordinador del grupo parlamentario de Morena, diputado Moisés Ignacio Mier Velazco, subrayó que “el tema que hoy estamos abordando en el marco de la iniciativa de reforma a la industria eléctrica se refiere a la seguridad energética y seguridad nacional”. Preguntó cuál es el futuro de la industria eléctrica y cómo garantizar la confiablidad del sistema eléctrico en nuestro país.  

También de Morena, el diputado Leonel Godoy Rangel refirió que el artículo 28 constitucional señala que el Estado mexicano tiene como áreas estratégicas: correos, telégrafos y radiotelegrafía, “áreas que no tienen ninguna utilidad y se le quita la capacidad en este artículo al Estado mexicano de generar la energía eléctrica, ese es el motivo de esta propuesta de reforma”. Dijo que se aceptan propuestas que ayuden a dar disponibilidad y confiabilidad al sistema eléctrico.  

El diputado Santiago Torreblanca Engell (PAN) sostuvo que la falta de inversión en generación, transmisión y distribución es lo que pone en riesgo la seguridad energética “y sin un esquema en el que participemos de manera ordenada todas y todos, va a ser imposible dar cumplimento a esto”. Preguntó sobre los gaseoductos.     

De la misma bancada, el diputado Gabriel Ricardo Quadri de la Torre hizo notar que el Estado nunca ha perdido el control del Sistema Eléctrico, por lo que se tienen todos los mecanismos para regular y operar al sector. “Los cambios que expresan los funcionarios de la CFE no requieren una reforma constitucional”. Añadió que lo que hay detrás de esta contrarreforma es una ambición monopólica, retrógrada y extemporánea que está fuera de lugar en el mundo moderno.  

Del PRI, la diputada Blanca Alcalá Ruiz pidió saber cuál es el balance de la reforma de 2013 y “a qué nos podemos enfrentar con las modificaciones actuales”. También cuestionó por qué es importante tener órganos autónomos; asimismo, qué está fallando en la planeación. Comentó que distintos estudios señalan que la producción de la CFE está por arriba de lo que implican los otros generadores.   

El diputado del PRI, Pedro Armentía López, comentó que después de siete días de foro la CFE no ha podido transmitir y explicar cuánto costaría generar estas nuevas plantas, las líneas de distribución, la modernización y de qué tamaño tendrá que ser la aportación patrimonial para que la ciudadanía tenga energía suficiente, limpia y a menor costo. Cuestionó respecto a qué impacto tendrá en el sistema eléctrico mexicano generar un monopsonio y aparte tener el uno por ciento de la generación de la energía privada.

Este miércoles se llevó a cabo en la Cámara de Diputados el Foro 7: Sistema Eléctrico, Seguridad Energética y Seguridad Nacional, como parte del Parlamento Abierto en torno al análisis de la iniciativa de reforma eléctrica enviada por el titular del Ejecutivo Federal. 

En el encuentro, con el tema “El Papel del Estado en la Construcción del Sistema Eléctrico Nacional”, especialistas externaron sus posturas y dieron respuesta a cuestionamientos de las y los diputados de diversos grupos parlamentarios.  

El presidente de la Junta de Coordinación Política, diputado Rubén Moreira Valdez (PRI), agradeció a los ponentes su disposición para estar en la Cámara de Diputados y plantear su posición “sobre un tema importante para la nación que es cómo sostener con energía eléctrica al país”, y llevar a cabo un diálogo para aclarar las dudas y ampliar conocimientos. 

Aclaró que estos foros están diseñados para hacer preguntas, escuchar a los ponentes, y consideró que fue una jornada de trabajo muy buena. 

Participantes

Al hablar en contra de la propuesta, Luis Serra Barragán, director ejecutivo de la Iniciativa de Energía del Tecnológico de Monterrey en la Escuela de Gobierno y Transformación Pública, señaló que el Estado tiene como función operar en condiciones de continuidad, seguridad, sustentabilidad y eficiencia dicho sistema. Consideró que un sistema eléctrico moderno es complejo, pero es flexible y eso significa que tienen que adecuarse y hacerse inversiones para el acoplamiento de esas tecnologías a la red eléctrica.  

Estimó que “deberíamos estar mirando hacia un fenómeno que es irreversible: la digitalización de la red eléctrica y la industria 4.0”. Enfatizó que la seguridad energética debe garantizar el acceso a energías limpias y asequibles en un esquema donde los resultados sean trazables, que estén sujetos a evaluaciones independientes y que incluyan a todos los actores de la sociedad.  

A favor de la propuesta, Rosío Vargas Suárez, investigadora del Centro de Investigaciones sobre América del Norte de la UNAM, señaló que “la industria eléctrica es estratégica por su importancia para la economía y la sociedad, no es una actividad más ni un bien comercializable; puede existir con el sector privado, pero corresponde al Estado ser el garante del acceso universal a la electricidad sin restricciones operativas ni de mercado”. 

Resaltó que existen riesgos y amenazas en la industria eléctrica que pueden poner en peligro la seguridad nacional. La magnitud de los actuales y su capacidad y daño físico y económico a la infraestructura y otras actividades de la industria obligarían a otórgales la mayor importancia. Destacó que la planeación es un elemento importante a futuro y “difícilmente yo veo en un actor privado toda esta visión nacional”. 

En contra, Fernando Zendejas Reyes, ex subsecretario de Electricidad de la Secretaría de Energía, señaló que de acuerdo a la ley corresponde exclusivamente a la nación la planeación y control del sector eléctrico, “en ningún lado dice sector privado”. Hoy la Ley de la Industria Eléctrica permite la participación de particulares en la generación y suministro, “lo cual estaría en entredicho y el suministro estaría completamente prohibido de aprobarse esta nociva iniciativa de reforma energética”.     

“La disyuntiva es ¿qué queremos como país? ¿Queremos un sistema eléctrico nacional que permita una participación, como lo dice la Constitución, de los sectores público y privado, con reglas claras, con un Estado rector? ¿o queremos un monopsonio en el que una sola empresa compre, venda y fije tarifas y se condene a tener que hacer todas las inversiones”. Resaltó que “las plantas de generación tienen una vida útil, no son perpetuas y las líneas de transmisión y distribución necesitan ampliarse y modernizarse”.  

Al externar su postura a favor, Guillermo Nevárez Elizondo, director de Distribución de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), afirmó que el sistema eléctrico nacional es uno de los más grandes del mundo, que está interconectado y es robusto. Es un sistema integrado que da servicio a todo el país y alcanza el 99.2 por ciento de cobertura del servicio a toda la República.  

Subrayó que la seguridad energética es muy importante para la autosuficiencia y el abastecimiento continuo a la población, “pero sin trucos ni intereses que engañen en el tema de las tarifas reguladas con el costo marginal, con la tarifa social”.   

Karla Cedano, responsable de Gestión de Tecnología del Instituto de Energías Renovables (IER), al manifestarse en contra dijo que “poner más plantas nucleares sería un grandísimo error siempre”. Consideró que para alcanzar la seguridad energética se requiere la colaboración de todos, gobierno, academia, industria y sociedad; “es responsabilidad del Estado, pero tenemos todos responsabilidad en eso”.  

Estimó que es necesario democratizar la energía, formar más talento en investigación y desarrollo e innovación en México; “tenemos que hacer financiamiento sustentable, no sólo económico. Requerimos de organismos reguladores autónomos e independientes, “no puede ser juez y parte la CFE, necesitamos que haya esa independencia, esa gobernanza sana” y un sistema energético sustentable, seguro y soberano.        

A favor, Carlos Morales Mar, director de Operaciones de la CFE, comentó que hay tres pilares que se buscan con esta reforma eléctrica, que es la garantía del suministro, precios justos y un modelo sostenible. Precisó que de las diferentes tecnologías que existen en la generación actual algunas emiten contaminantes, otras son muy caras, o intermitentes; “entonces, no existe una generación energéticamente ideal, porque para el futuro nosotros debemos estar viendo cuáles son las disponibilidades de los recursos y no depender tanto de lo externo”. 

Señaló que la reforma energética de 2013 es insostenible y desordenada, vulnera al sistema eléctrico nacional, genera alta concentración nodal de centrales eléctricas renovales, saturación regional de líneas de alta tensión, sobreoferta de capacidad por permisos otorgados sin planeación, imposición legal y regulatoria, entre otros. Por eso se requiere la aprobación de la iniciativa presidencial de reforma constitucional en materia eléctrica. 

Participación de diputadas y diputados

El coordinador del grupo parlamentario de Morena, diputado Moisés Ignacio Mier Velazco, subrayó que “el tema que hoy estamos abordando en el marco de la iniciativa de reforma a la industria eléctrica se refiere a la seguridad energética y seguridad nacional”. Preguntó cuál es el futuro de la industria eléctrica y cómo garantizar la confiablidad del sistema eléctrico en nuestro país.  

También de Morena, el diputado Leonel Godoy Rangel refirió que el artículo 28 constitucional señala que el Estado mexicano tiene como áreas estratégicas: correos, telégrafos y radiotelegrafía, “áreas que no tienen ninguna utilidad y se le quita la capacidad en este artículo al Estado mexicano de generar la energía eléctrica, ese es el motivo de esta propuesta de reforma”. Dijo que se aceptan propuestas que ayuden a dar disponibilidad y confiabilidad al sistema eléctrico.  

El diputado Santiago Torreblanca Engell (PAN) sostuvo que la falta de inversión en generación, transmisión y distribución es lo que pone en riesgo la seguridad energética “y sin un esquema en el que participemos de manera ordenada todas y todos, va a ser imposible dar cumplimento a esto”. Preguntó sobre los gaseoductos.     

De la misma bancada, el diputado Gabriel Ricardo Quadri de la Torre hizo notar que el Estado nunca ha perdido el control del Sistema Eléctrico, por lo que se tienen todos los mecanismos para regular y operar al sector. “Los cambios que expresan los funcionarios de la CFE no requieren una reforma constitucional”. Añadió que lo que hay detrás de esta contrarreforma es una ambición monopólica, retrógrada y extemporánea que está fuera de lugar en el mundo moderno.  

Del PRI, la diputada Blanca Alcalá Ruiz pidió saber cuál es el balance de la reforma de 2013 y “a qué nos podemos enfrentar con las modificaciones actuales”. También cuestionó por qué es importante tener órganos autónomos; asimismo, qué está fallando en la planeación. Comentó que distintos estudios señalan que la producción de la CFE está por arriba de lo que implican los otros generadores.   

El diputado del PRI, Pedro Armentía López, comentó que después de siete días de foro la CFE no ha podido transmitir y explicar cuánto costaría generar estas nuevas plantas, las líneas de distribución, la modernización y de qué tamaño tendrá que ser la aportación patrimonial para que la ciudadanía tenga energía suficiente, limpia y a menor costo. Cuestionó respecto a qué impacto tendrá en el sistema eléctrico mexicano generar un monopsonio y aparte tener el uno por ciento de la generación de la energía privada.